viernes

Perdón por respirar

No entiendo por qué.
Intento darlo todo cuando siento...
Y nunca vuelve a mí.
Siento que poco a poco voy perdiendo, y me quedo vacía.
Desearía no creer, No creer en nadie.
En ninguna palabra,
Que no me engañe ni una sola letra,
Que no jueguen conmigo los acentos...
¿Por qué no puedo odiarte?
¿Por qué sigo creyéndote?
¿¡POR QUÉ?!
¿Por qué soy tan estúpida?
Ojala leas esto,
Ojala te des cuenta de que sigo malgastando mis segundos en ti,
mis lágrimas.
Mi vida.
No me queda nada dentro,
grita si quieres,
Espero que te caiga bien mi eco.

1 comentario:

Aprieta el gatillo.