martes

El día de mañana

Desde el día diez todo está muy raro.
Está raro el sol, que ilumina más que de costumbre,
Raras las horas, que pasan rápidas sin ninguna razón aparente...
Rara yo, que sólo pienso en tenerte.
Y piénsalo, todo ha cambiado.
No tengo ganas de salir, beber, el rollo de siempre,
No me apetece creer en un mañana sin tus palabras.
No sé qué me has hecho...
Pero te echo de menos.
Necesito
verte.
Mis manos echan de menos tus manos...
Mis manos echan de menos tu piel.
Mis manos echan de menos tu pelo y tu cuello
y mí dolor echa de menos que le seas infiel.
Por eso me gustaría verte para saber
Qué se siente cuando no estás.

2 comentarios:

  1. Hola Amaya, llegué a conocer tu blog y felicitar a la calidad del contenido ... ¡Felicitaciones!

    Aprovecho y le invitamos a visitar y comentar en mi blog.

    http://wwwteologiavivaeeficaz.blogspot.com/

    El profesor Francisco Netto

    ResponderEliminar

Aprieta el gatillo.